Un fallo da la razón al Rastro de Benidorm contra el recurso de AICO

Los concejales de Contigo Somos Democracia en el ayuntamiento de Benidorm, Leopoldo Bernabeu y Juan García, han puesto en conocimiento de la sociedad civil, el reciente fallo del Tribunal Superior de Justicia de la Comunicada Valenciana, contra el recurso que en su día presentó la Asociación Independiente de Comerciantes de Benidorm contra la instalación y apertura del conocido como Rastro o Tercer Mercadillo de Benidorm, en fase de finalización  en estos momentos frente a la ITV de la ciudad.

Un Fallo que viene a ratificar todo cuanto se dijo por parte de ambos concejales hace ya dos años cuando formaban parte en el Consistorio de los grupos municipales de Ciudadanos por Benidorm y Compromís-Los verdes, en el que avisaron que todas las actuaciones que se estaban llevando a cabo desde el ámbito municipal para impedir la puesta en marcha de esta empresa privada, no eran más que meras cortinas de humo para desviar la atención sobre una realidad administrativa imparable y un intento de querer quedar bien con los comerciantes de Benidorm proponiendo recursos que no sólo no tenían recorrido jurídico, sino que podían terminar costándole una importante cantidad económica al erario público en concepto de indemnizaciones a favor de esta empresa privada por el daño causado durante estos tres años en los que se les han puesto todo tipo de trabas burocráticas para poder llevar a cabo su instalación.

Pura demagogia de los equipos de Gobierno actual y anterior

Toda esta historia empezó hace ahora tres años, con la solicitud por parte de una empresa privada, que pretendía poner en marcha un Rastro privado, de unos terrenos municipales ubicados en la avenida comunidad valenciana. Muchos fueron los pasos administrativos que esta empresa vio como se le iban aprobando desde el ayuntamiento gobernado por el PSOE hasta que pasadas las elecciones municipales de 2015, el hasta entonces equipo de Gobierno se lavó las manos y no quiso reconocer todos los pasos dados como una realidad administrativa incontestable. Y el actual no tuvo más remedio que seguir con los procesos que marcaban la legalidad, eso sí, con el añadido de interponer un recurso contencioso contra su instalación, alegando una lesividad difícilmente demostrable contra nadie, pero que en su momento le vino muy bien al Gobierno de Toni Pérez, que actuando de una forma absolutamente demagógica, quiso aparentar su cercanía con unos comerciantes a los que ya se había puenteado con anterioridad, no en vano fue el PSOE quien dio el visto bueno a la instalación de esta empresa y el Sr. Gasent, a la sazón Presidente de AICO, quien también la avaló con su firma, aunque posteriormente lo negara con tal rotundidad que llegó a solicitar un calígrafo para demostrar que la firma que rubricaba aquel documento era falsa.

Se está a tiempo de evitar males económicos mayores

Todo un esperpento que ahora empieza a ver su final con este fallo del TSJCV que desestima todas las alegaciones presentadas por AICO para la paralización del proyecto. Aunque tal y como han adelantado esta mañana los ediles Leopoldo Bernabeu y Juan García, todavía se está a tiempo de reparar males mucho mayores. No en vano, la sentencia definitiva contra el recurso del ayuntamiento, que se supone está al caer, es la que determinará la cuantía económica que habrá que sufragar a los actuales propietarios del Rastro por los años en los que se la ha ido dilatando la puesta en marcha del proyecto. Se estima que la cuantía podría llegar a ascender hasta los 2 millones de euros.

Bernabeu y García han dejado claro que en manos del alcalde está el que esto no suceda, pues si finalmente la sentencia es contraria al municipio, ambos munícipes solicitarán que el importe del Fallo lo sufraguen con su Patrimonio aquellos concejales que permitieron con su voto que este recurso se presentara. La empresa Outlet Market ha vuelto a mostrar su predisposición al diálogo y los técnicos municipales han manifestado que lo correcto sería retirar el recurso, ahora que todavía se está a tiempo.